Así que esta va a ser mi habitación...

Ya había soltado las maletas y tenía guardado la mayoría de mi equipaje. Me sentí un tanto extraño al no encontrar nadie en mi habitación. Mis compañeros debían de estar de vacaciones, o quizás no paraban mucho.
"Igual tienen alguna novieta y no suelen dormir por aquí" Me dije divertido. Lo cierto era que en aquel internado no era muy dificil ligar. Un nombre salpicó mi mente "Emma" Ella había sido el claro ejemplo.

La habitación estaba bastante bien. Cama, armario, incluso un escritorio para mí. Saqué el portatil, en el internado había conexión wifi, así que no tardé mucho en conectarme a internet. Estaba ensimismado en lo mío cuando alguien entró en la habitación...

Me acerque y le di un intenso beso
Gracias, Gracias, Gracias!!!!!!!!!

-¿A qué se debe tanto entusiasmo?-sonreí ampliamente, haciéndome un poco el tonto y sujetándola por las mejillas para continuar con aquel beso en cuanto ella respondiese.

Quien deberia pregunar soy yo.
Desde quando sabes escribir tan buenas historias??

No pude evitar la sonrisa que se me pintó en el rostro de "me has pillado" Para aludir a su pregunta me puse en pié para soltar el portatil en el escritorio, con tan mala suerte que con los nervios me derramé un vaso de agua encima.
-Mierda-dije mientras observaba que toda la parte superior de mi uniforme había quedado empapada. No tardé en quitarme la camiseta y dejarla sobre la mesa, dejando mi torso de gimnasio al descubierto.

le saque del armario otra camiseta y le alargue el brazo esperando a que el la cogiera

Alargué la mano, pero en lugar de cojer la camiseta, agarré su brazo atrayéndola hacía mí, fundiéndome en un beso inesperado con ella.
-¿Por dónde íbamos?-sonreí con picardía sin apartar mis ojos de los suyos, con la boca aún a centímetros de la suya.

Me aparte y le dije:
No acordamos que esperariamos un tiempo??

Encogí los ojos, de modo que quedaron como dos pequeñas rendijas azules.
-Tienes razón, lo siento-besé su mejilla cálidamente-no quiero obligarte a hacer nada que no quieras.

gracias.
Me fui para mi habitacion sin pensarmelo 2 veces

Salió corriendo, por lo que no me dió tiempo a despedirme. La puerta se cerró con un ruido seco y yo me dejé caer pesadamente sobre la cama. Había sido un día bastante ajetreado.
-Chica tímida esta Emma-murmuré con los brazos tras la cabeza. Minutos después me quedé dormido.

Me desperté a la mañana siguiente, con el uniforme puesto y la cama hecha.
-No me puedo creer que me durmiese así-me dije como reproche, poniéndome en pie. Me froté los ojos, había dormido fatal. Me puse bien el cuello de la camisa y salí de la habitación con intención de ir a darme una ducha.